El placer de la mujer.

ESTIMULAR LOS SENOS DE LA MUJER

Si bien es cierto que algunas mujeres no tienen sensibilidad
alguna en sus senos, otras registran tal grado de excitación al ser acariciados que pueden llegar a provocarle un orgasmo. La
estimulación de los pechos de la mujer suele conllevar una sensación de voluptuosidad en la vulva lo que se traduce en la
lubrificación de la vagina. Si la mujer no se muestra sensible, el
hombre deber mostrarse paciente y hábil, ya que después de
unos meses de estimular los senos de la mujer es posible que
ésta vaya sintiendo algo, pues no hay duda de que las terminaciones nerviosas en las glándulas mamarias existen en
todas las mujeres.
Comience besando suavemente todos los senos y después concéntrese en la zona de los pezones. Cójalos con los labios,
métalos en la boca y succione suavemente, alternando de seno periódicamente.

TECNICAS ORALES

Empiece por sus rodillas acariciando y abrazando el interior de
uno de sus muslos, y luego cambiando de lado. Continúe suavemente hasta notar cierto grado de excitación.
En ese momento empiece a lamer suavemente con su lengua las zonas cercanas al pubis. Vaya lamiendo y succionando
suavemente ese maravilloso mundo que se aparece ante usted e intente localizar el clítoris.
Una vez localizado vaya estimulandolo con unos movimientos
rápidos y en todas direcciones de su lengua; este proceso debe ser más rápido cuanto más alejado esté del clítoris y más lento a medida que se vaya acercando a él.
Cuando la mujer ya está muy excitada entonces deber lamer
fuertemente con toda su lengua la zona del clítoris y su pareja
explotará de placer.
Al mismo tiempo que utilice estas técnicas orales no se olvide de acariciar con sus manos los senos, el vientre y todas las partes del cuerpo que le sean accesibles.
Esta técnica no es universal y cada mujer reaccionará de forma diferente a las caricias y tendrá sus propias preferencias. No dude pues en preguntar durante el acto si le gusta su manera de acariciarla o si ella lo prefiere de una forma más dulce, más profunda, más directa... en definitiva déjese guiar.

¿CÓMO RECONOCER LOS SIGNOS DE GOZO Y

SATISFACCION EN UNA MUJER?

Su cuerpo se distiende, sus ojos se cierran, ella preside la timidez y hace esfuerzo para que los órganos sexuales se unan lo más estrechamente posible.
Las cinco reacciones de la mujer ante las acciones del hombre son las siguientes, según Sou-Nu:
Si la mujer desea la unión sexual, se observará un cambio en la
respiración.
Si desea ser penetrada, los orificios nasales se dilatarán y su boca quedará entreabierta.
Si desea que suba la marea del Yin, su cuerpo se estremecerá y se constreñirá notablemente.
Si desea ardientemente ser satisfecha, su transpiración será abundante.
Si su deseo ha sido calmado, su cuerpo se distenderá y sus ojos permanecerán cerrados como si estuviera dormida.
La lista de Wou-Hien sobre los síntomas reveladores del placer en la mujer son:
Ella jadeará y no podrá controlar el tono de su voz.
Sus ojos están cerrados y los orificios nasales dilatados y difícilmente puede hablar.
Su mirada sigue fijamente a la del hombre.
Sus orejas se enrojecen y su rostro también, pero la punta de su lengua estará ligeramente fina.
Sus manos estarán ardiendo, su vientre caliente y al mismo tiempo le murmurará palabras casi ininteligibles.
Su semblante parecerá estar hechizado, su cuerpo se quedará como muerto y sus miembros flácidos.
Debajo de su lengua, la saliva fluye abundantemente y su cuerpo está pegado al del hombre.
Las palpitaciones de su vulva se perciben fácilmente y está muy mojada.
Los diez signos en la mujer que indican al hombre los pasos a
seguir:
1/ Ella abraza al hombre con los dos brazos y le muestra que desea un contacto corporal más intenso.
2/ Levanta sus piernas mostrándole que desea ser acariciada en la zona del clítoris.
3/ Tensa su vientre. Indicando que desea ser penetrada superficialmente.
4/ Sus piernas se ponen en funcionamiento. Es una forma de expresar un gran placer (contrae sus muslos).
5/ Con sus pies acaricia y abraza a los del hombre. Significa que desea penetraciones más profundas.
6/ Cruza sus piernas alrededor del hombre. Es señal de que el placer va en aumento.
7/ Se empieza a mover de un lado al otro. Las penetraciones deben ser más profundas y fuertes.
8/ Su cuerpo se incorpora y se funde con el del hombre. Es un momento de placer extremo.
9/ Su cuerpo se distiende. Demuestra que su cuerpo y sus miembros se van relajando.
10/ Su vulva se humedece abundantemente. El hombre sabrá que su pareja está satisfecha.

EL PUNTO "G" EN LA MUJER

Usted seguramente habrá oído hablar de esta famosa zona erógena femenina llamada punto "G".

Esta zona está situada en el interior de la vagina y su tacto es

parecido al de un botón de relieve ligero. Se ubica exactamente detrás del hueso púbico y es muy fácil de localizar después del orgasmo ya que se convierte en una zona muy sensible.

Apoye el dedo suavemente y de una forma compasada sobre el punto "G", modificando el ritmo según el resultado obtenido. Este tipo de caricia requiere de mucho tacto ya que el hombre puede acelerar o ralentizar, aumentar o reducir la presión y con ello hacer variar el grado de excitación de su pareja. Se recomienda que para efectuar este tipo de caricias las manos estén completamente limpias, las uñas bien cortadas y limpias y no estaría de más utilizar un poco de crema o aceite lubricador a fin de hacerlas más suaves si cabe.

¿CÓMO PUEDE UNA MUJER EJERCITAR SU VAGINA?

Una mujer con una vagina musculosa puede dar una incomparable sensación al hombre durante la penetración.

Para tonificar su vagina puede realizar los siguientes ejercicios:

Cada vez que la mujer tenga deseos de orinar deber contraerse y después relajarse un segundo y así repetidamente el mayor tiempo posible.

En la cama o cuando esté tomando un baño introduzca dos dedos en el interior de su vagina e intente contraer las paredes vaginales, sin juntar las piernas, repetidamente hasta que pueda sentir los músculos en sus dedos. Si al principio resulta difícil, puede empezar con tres dedos y después ir disminuyendo sucesivamente un dedo cada vez hasta que sea

capaz de sentirlo sólo con el dedo pequeño. En ese momento los músculos de su vagina habrán adquirido la fuerza suficiente como para controlar el nivel de satisfacción durante la penetración.


VENCER LA FRIGIDEZ

Una mujer frígida puede pasarse toda su vida sin disfrutar del

éxtasis sexual con su compañero. Muchas mujeres frígidas podrían ser excelentes compañeras sexuales a condición de que su pareja sea un hombre paciente y que la ayude lo suficiente como para alcanzar un orgasmo.

Una mujer frígida debe primero aprender a aceptar su propia sexualidad y a rechazar su código de moralidad o el complejo de culpabilidad que pueda derivarse de su educación o de experiencias desagradables acontecidas en su pasado. En esta labor el hombre juega un gran papel y debe mostrarse siempre muy paciente y comprensivo, pues la mujer frígida deber tener plena confianza en él.

El hombre deberá intentar conocer todos los sentimientos negativos que la perturban. Siempre deberá hablarle y escucharla muy atentamente. Cuando los problemas sean conocidos por ambos él deberá con mucha inteligencia y ternura, hacerle comprender que sus miedos y sentimientos son irracionales.

Toda la atención del hombre deber estar centrada en el placer de la mujer. No deber mostrarse nunca ansioso, sino al contrario: ser muy tierno con ella a través de palabras, besos y caricias. De esta forma la mujer frígida irá ganando confianza y progresivamente irá aprendiendo a conocer su cuerpo y reaccionará a las caricias y estímulos sexuales de su pareja.

Las cinco palabras que nos se deben olvidar son: paciencia, compresión, confianza, ternura y voluntad.

Teniendo en cuenta estos principios hay muchas posibilidades de que una mujer frígida se transforme en una mujer muy sensual y no tenga nunca más problemas de este tipo. Si a pesar de los esfuerzos mutuos de la pareja no llega a resolver el problema, es posible que sea necesario el consejo de un terapeuta o psicólogo